sábado, 27 de julio de 2019

ULISES Y PENÉLOPE: REGRESAR PARA SER


El Regio, de fiesta, recibe por estas horas una platea infantil numerosa, teniendo en cuenta la situación económica del país, dura, larga, injusta. Aún así, las familias se las ingenian para cubrir las expectativas de los chicos en diferentes formatos de espectáculos. Chapeau por ellas y los artistas que apuestan por “el hacer con talento”, porque precisamente esta versión nos habla de la patria.
Telón descorrido, comenzamos a ver detalles de una escenografía que, desde la voz sugerente de Emanuel Abbruzzese (esa que uno quiere escuchar en cualquier cuento), nos confirma que habrá un tiempo de guerra. Inspirada en La Odisea, del poeta griego Homero, y la ópera El regreso de Ulises a la patria, de Claudio Monteverdi y Giacomo Badoaro, de la mano del elenco de titiriteros del Teatro San Martín, ingresamos a un universo épico.
Los Dioses se divierten, dirigiendo los destinos de los hombres a su entero antojo y capricho. Neptuno –en la mitología romana, dios del mar– ha enfurecido: Ulises que ha sorteado todas sus trampas, acaba de invadir Troya con sus leales soldados, y ha ganado una contienda de 10 años. Este umbral es intolerable para la deidad y lo condena a deambular por otros 10 en el Mediterráneo.
La versión es narrada con distintas técnicas de manipulación, todas con verosimilitud, en el pequeño retablo, gran escenario, tras la pantalla. Sobre teatro negro, una danza de medusas producen un cuadro de gran belleza visual, articuladas con la técnica de varilla. Ulises está en alta mar y lo vemos en pequeño formato, a veces sobreviviendo en su nave a grandes olas (ilusiones creadas con artilugios y diseño sonoro eficaces), y otras, rodeado por un cardumen de peces, pulpo y delfín amigables.
Los títeres de sombras, visibles en lo alto de la escena, son muy efectivos para comunicar momentos claves del relato, como cuando Ulises le arranca a Polifemo –cíclope puesto por Neptuno en el camino del héroe- su único ojo. Los titiriteros se agrupan y desplazan, con yelmos, escudos y lanzas, recreando el clima de combate propio del poema. La platea permanece muy atenta. 
Mientras tanto, Penélope, valiente, espera a su hombre en Ítaca, junto a su hijo Telémaco y la criada Euriclea. Teje de día, desteje de noche y logra así frenar la ambición de los pretendientes para salvar el Reino. A modo de metáfora, la versión describe la espera prolongada con juegos de madejas donde los hilos se entrecruzan de un extremo a otro del escenario, en manos de los titiriteros.


Ítaca acontece sobre un retablo de mesa y sobre éste también suceden artificios muy interesantes, como la técnica de títere Tantamareska. Los titiriteros prestan su cabeza y con sus manos articulan cuerpos de pequeño formato, dicho de otro modo, se transforman en títeres de mesa para vincularse con Penélope. Por ejemplo, cuando intentan cortejarla para ocupar el lugar de Odiseo (nombrado en griego). La técnica también produce gran encantamiento para la platea menuda, cuando los príncipes son hechizados por Minerva y sobreelevan el retablo: un pasaje muy logrado. O cuando lo titiriteros animan a Zeus, padre de dioses y hombres, responsable supremo de la justicia del mundo. Desde su nube, pone fin al castigo que soporta el héroe, entre rayos y centellas. Otras técnicas también generan asombro, como el títere de pistolete, que da vida al mochuelo (lechuza) de Minerva, acompañándola a su paso y aportándole más sabiduría. La marioneta que encarna a Argos, el perro del héroe, primero en reconocerlo a su regreso y festejarlo.
La Odisea va acabando y acontece el retorno a la patria querida. Cuando el hábil guerrero vuelve, ya no es un títere sino un actor: Esteban Quintana representará una victoria inolvidable. 



En toda esta aventura, Minerva -protagonizada con solidez por Valeria Galíndez– ha tenido un gran papel. La decisión de escoger la deidad romana y no la griega (Palas Atenea) pone a la historia un condimento diferente, portador de un mensaje más esperanzador. Ella le susurra la idea del gran y mítico caballo de madera, que albergará a los soldados griegos para ingresar a Troya. Hecho de troncos, la estética del equino se vincula tiernamente con la platea; luego, la imagen se reproduce en la luna, a través de títeres de sombras con formas igualmente simples. 
Librado del cíclope, del canto de sirenas, de los poderes de la ninfa Calipso (¡afortunadamente!) y ahora, oculto entre un vestuario de mendigo, el rey llega a la tierra que lo constituye. Él y sólo él puede tensar su propio arco –un cuadro muy eficaz con flechas certeras que liquidan a sus adversarios-.
El amor le ha ganado a la distancia y al tiempo. Los amantes ya reconocidos, permanecen el uno para el otro. Y el beso, señoras y señores, niñas y niños, es largo y profundo. Todos celebran (¡celebramos!).
Gabriela Marges nuevamente deja su marca en esta versión libre para títeres sobre un  clásico de la literatura, con textos económicos (sólo los necesarios), acciones limpias y precisas, en medio de una música envolvente y con una troupe de intérpretes formidables. El espectador sigue la trama en calma, es el silencio que se corresponde a la fascinación, al que le sigue un caluroso aplauso. Para espectadores a partir de los 5 años. 

👏 EXCELSA
     Patricia Lanatta

FUNCIONES: 
Hasta el 4 de agosto, de martes a domingos, a las 15 h
Teatro REGIO / Avda. Córdoba 6056 
A partir del 31 de agosto hasta el 30 de noviembre, sábados y domingos, 11:30 h
Teatro DE LA RIBERA Av. Pedro de Mendoza 1821 
͢
Autoría y dirección/Gabriela Marges
Elenco:
Ulises, Rey de Ítaca/Esteban Quintana
Minerva, Diosa de la Sabiduría/Valeria Galíndez
Ninfas • Deidades/Lorena Azconovieta, Julia Ibarra
Neptuno, Dios del Mar/Emanuel Abbruzzese
Euriclea, criada de Penélope/Myrna Cabrera
Aquiles • Menelao • Ayax, soldados griegos/Bruno Gianatelli, Victoriano Alonso, Mariano Pichetto
Soldados troyanos/Fernando Morando, Pablo Del Valle, Ivo Siffredi
Amazonas/Silvia Galván, Ayelén Allende
Voz narrativa de Ulises anciano/Emanuel Abbruzzese

INTÉRPRETES TITIRITEROS EN LA TÉCNICA DE TÍTERE DE MESA O VARILLA
Ulises/Esteban Quintana
manero/Victoriano Alonso
Penélope/Ayelén Allende 
manero/Victoriano Alonso
Telémaco Mariano Pichetto 
manero/Bruno Gianatelli
Menelao/Victoriano Alonso
Ayax/Mariano Pichetto
Euriclea/Silvia Galván 
manero/Bruno Gianatelli

INTÉRPRETES TITIRITEROS EN LA TÉCNICA DE TÍTERE TANTAMARESKA
Zeus/Bruno Gianatelli 
manero/Ivo Siffredi
Pisandro/Fernando Morando 
manera/Julia Ibarra
Anfínomo/Ivo Siffredi
manera/Myrna Cabrera
Antínoo/Pablo Del Valle, Lorena Azconovieta
Cabeza de pulpo • Escila/Ivo Siffredi
Cabezas de pez • Caribdis/Pablo Del Valle, Fernando Morando

INTÉRPRETES TITIRITERAS EN LA TÉCNICA PISTOLETE 
Mochuelo de Minerva/Myrna Cabrera, Julia Ibarra

INTÉRPRETE TITIRITERO EN LA TÉCNICA MARIONETA 
Argos, perro de Ulises/Mariano Pichetto

INTÉRPRETES TEATRO NEGRO
Delfín/Ivo Siffredi
Medusa gigante/Mariano Pichetto, Ayelén Allende
Medusa Esther/Fernando Morando
Coro de Medusas/Myrna Cabrera, Victoriano Alonso, Lorena Azconovieta, Julia Ibarra
Cardumen de peces plateados/Pablo Del Valle
Sirenas/Julia Ibarra, Lorena Azconovieta

INTÉRPRETES TEATRO DE SOMBRAS
Ivo Siffredi, Pablo Del Valle, Fernando Morando

Coordinación de producción/Mariana Abbas
Producción técnica/Magdalena Berretta Miguez
Asistencia de dirección/Mariana Díaz
Asistencia y producción artística/Natalia Pace
Diseño de sonido/Francisco Antoniassi Curazzi
Selección musical/Gabriela Marges
Diseño de iluminación/Pablo Curto, Pasha Kyslychko
Diseño de vestuario • maquillaje • zapatería • peluquería/Luciana Hernández, Paloma Lamas
Diseñorealización de títeres • escenografía  utilería/Pasha Kyslychko
Realización de títeres de teatro de sombras • teatro negro/Alejandra Farley, Katy Raggi
Realización de video/Esteban Fernández
Fotografía/Carlos Furman